


Este sistema usa una herramienta especial que se baja varias veces para ensanchar la perforación. En cada bajada, la herramienta corta y saca la tierra a la superficie. Su diseño de corte inverso asegura que el fondo quede limpio y se alcance la profundidad exacta, incluso si algo de tierra vuelve a caer.
Una vez terminada la apertura, el mismo sistema limpia el fondo, dejando la perforación lista para la armadura. Un marcador en superficie controla cuánto se ensanchó en cada bajada, algo clave bajo el agua. Duplicar el diámetro del fuste cuadruplica la capacidad de apoyo del pilote. Este método es seguro y permite ahorrar hormigón.

